Mantener la salud de las uñas y la apariencia de las uñas es una parte importante de la higiene personal diaria. Las uñas sanas y bien cuidadas siempre hacen que una persona se vea más ordenada y profesional. Una de las mejores formas de mejorar la salud de las uñas es llevar una dieta saludable con suficientes proteínas, calcio y vitaminas. Las uñas necesitan una dieta equilibrada para prosperar, al igual que el resto de su cuerpo.
Complementa tu dieta con calcio y biotina, dos nutrientes que las uñas necesitan para estar fuertes. La salud de las uñas proviene de la forma en que las mantiene y las cuida. Lo mejor es recortarlos y archivarlos con un borde redondeado; recuerde limar sólo en una dirección, no en un movimiento de vaivén. Este tipo de movimiento podría debilitar la uña y hacerla más propensa a partirse y agrietarse.
Limpie suavemente debajo de la punta de la uña, pero no raspe demasiado y asegúrese de no causar rasguños o cortes debajo del lecho ungueal. Además, es mejor empujar las cutículas hacia atrás sumergiéndolas primero en agua tibia y luego presionando suavemente con un palito de naranja. Nuevamente, no presione demasiado, no haga ningún corte y no corte las cutículas. Las cutículas son una parte necesaria de la uña y ayudan a evitar que se produzcan lesiones e infecciones en el lecho ungueal.
Si opta por pintarse las uñas, recuerde quitarse el esmalte cada pocas semanas para que las uñas tengan tiempo de respirar. Además, si elige usar colores oscuros, una capa base de esmalte de uñas puede evitar que el color manche la uña. Aunque las uñas manchadas no afectan realmente la salud de las uñas, ciertamente pueden darles una apariencia poco atractiva. Si usa uñas postizas, quítelas con regularidad y asegúrese de que sus uñas no se estén pelando, descascaradas o se pongan verdes; todos estos podrían ser indicadores de una infección fúngica o bacteriana. Asegúrese de que un manicurista esterilice los instrumentos a fondo o simplemente traiga los suyos.
Otras formas de mejorar la salud de las uñas son bastante sencillas. Lávese las manos con regularidad y aplique crema hidratante por la mañana y por la noche en las manos, las uñas y las cutículas. No se pique ni se muerda las uñas; esto puede hacer que la uña y la cutícula se rompan, lo que podría causar una infección. Finalmente, si nota cambios marcados en la salud de sus uñas y no mejora, puede ser necesario visitar a un dermatólogo para descartar cualquier causa médica subyacente.