¿Cómo afecta el consumo de proteínas a mi cuerpo?

Comer proteínas es esencial para la salud humana porque la proteína es uno de los nutrientes humanos clave, junto con las grasas y los carbohidratos. El cuerpo usa proteínas para construir células, regular la producción de enzimas y hormonas, mantener el equilibrio de líquidos entre las células y crear energía. Comer proteínas puede ayudar a mantener el cuerpo fuerte y puede regular importantes funciones metabólicas. Sin embargo, comer demasiada proteína puede causar problemas de salud.

La proteína está compuesta por los 20 aminoácidos esenciales que forman los componentes moleculares del cuerpo humano. Los tejidos del cuerpo humano generalmente están sujetos a un proceso continuo de agotamiento y renovación. El cuerpo generalmente usa proteínas para construir y renovar cada tipo de célula, incluidas las que forman huesos, músculos, órganos y tejidos conectivos.

Comer proteínas puede ayudar al cuerpo humano a fabricar enzimas y hormonas esenciales. Las hormonas como la insulina, que regula los niveles de glucosa en la sangre, generalmente están formadas por los aminoácidos esenciales que se encuentran en las proteínas. Las enzimas son moléculas de proteína que permiten que ocurran reacciones químicas biológicas. Las enzimas actúan como catalizadores químicos de las reacciones que ocurren dentro del cuerpo durante la digestión y otros procesos metabólicos. Comer proteínas ayuda a mantener los niveles de enzimas y hormonas normales para prevenir trastornos metabólicos y endocrinos.

La proteína también ayuda al cuerpo humano a mantener un equilibrio adecuado de líquidos en y entre las células. Las moléculas de proteína en la sangre llamadas albúminas y globulinas ayudan a crear la presión que generalmente regula el flujo de sangre dentro y fuera de las regiones capilares, donde la presión arterial a menudo es más baja.

El cuerpo humano generalmente usa carbohidratos y grasas para obtener energía, en lugar de proteínas. El cuerpo humano generalmente usa proteínas para obtener energía solo si las fuentes dietéticas de grasas y carbohidratos son bajas. Cuando el cuerpo usa proteínas para obtener energía, el mantenimiento de los tejidos y otras funciones corporales cruciales generalmente sufren. Es por eso que una dieta alta en proteínas pero baja en carbohidratos y grasas puede ser peligrosa.

El cuerpo humano generalmente puede almacenar el exceso de carbohidratos y grasas para su uso posterior, pero no puede almacenar proteínas. El cuerpo humano generalmente descompone las proteínas en sus componentes, los aminoácidos esenciales. El cuerpo humano generalmente elimina el nitrógeno de cualquier exceso de aminoácidos en la sangre. Este nitrógeno puede acumularse en los riñones y el hígado, dañando estos órganos y contribuyendo a la enfermedad hepática y renal. Comer proteínas en cantidades excesivas también puede contribuir a la osteoporosis, enfermedades cardíacas, cáncer y cálculos renales.