Los chefs deben elegir el mejor sustituto del caldo de pollo al pensar en el plato específico que están preparando. Los sustitutos se pueden hacer usando caldo de carne o vegetales, haciendo caldo en casa o usando agua. Las existencias son intercambiables en la mayoría de las recetas, y esto significa que el caldo de res, vegetales o cordero a menudo se puede usar en lugar del caldo de pollo. Sin embargo, algunos platos son más adecuados para ciertos tipos de caldo que otros. Los chefs también pueden hacer acciones en casa utilizando ingredientes comunes. También es posible sustituir el stock por agua simple o salada en algunos casos.
La forma más sencilla de elegir un sustituto para el caldo de pollo es reemplazarlo con un caldo diferente. La mayoría de las acciones se pueden usar indistintamente, por lo que cualquier acción que el chef tenga disponible será adecuada. El caldo de res, el caldo de verduras, el caldo de cordero y el caldo de ternera se pueden usar en lugar del caldo de pollo. Los chefs también pueden optar por usar un cubo de caldo deshidratado en lugar de caldo de pollo fresco si es posible. Estos cubos deben mezclarse con agua antes de agregarlos a un plato.
Algunos platos funcionan mejor con algunas acciones que otros. Por ejemplo, el risotto de champiñones a menudo se prepara con caldo de pollo como líquido principal, pero el caldo de verduras también funciona bien. El caldo de res, ternera o cordero no funcionaría tan bien con este plato, por lo que no deberían elegirse para reemplazar el caldo de pollo. Los chefs pueden ver diferentes recetas para el plato y ver si alguno usa un caldo alternativo.
El caldo de verduras se puede usar como sustituto del caldo de pollo y es fácil de preparar. Los cocineros deben cortar dos cebollas, dos zanahorias, tres tallos de apio y un bulbo de ajo y agregarlos a una sartén grande. Se pueden agregar a la mezcla condimentos como sal y pimienta negra y hierbas como las hojas de laurel. Se vierte agua hirviendo en la sartén para cubrir las verduras y la mezcla se deja cocinar durante una hora. Los sabores de las verduras se infunden en el agua y crean caldo.
El agua puede usarse como un sustituto del caldo de pollo si no hay otras opciones disponibles. Los chefs pueden considerar esta opción si tienen tiempo extra para cocinar el plato y si hay muchos sabores ya presentes en él. Por ejemplo, un plato que contenga cebolla, ajo, pollo, apio y champiñones creará su propio caldo si se cocina en agua. Sin embargo, el chef podría tener que dejar el plato para cocinar por más tiempo de lo habitual para permitir que el sabor se infunda en el plato.