Un aneurisma de la aorta ascendente es un ensanchamiento o hinchazón anormal de la parte de la aorta en el corazón humano conocida como aorta ascendente. Un aneurisma ocurre debido al debilitamiento de las paredes de la aorta, que es la arteria más grande del cuerpo. La porción que pasa por el tórax se conoce como aorta torácica y contiene la aorta ascendente.
La aorta ascendente comienza en el ventrículo izquierdo del corazón y se extiende hasta el arco aórtico o la curva de la aorta. La porción de la aorta más allá del arco aórtico pero aún dentro de la cavidad torácica se conoce como aorta descendente. La aorta es un vaso sanguíneo continuo y su función es suministrar sangre limpia y oxigenada al cuerpo.
Las fibras que forman la aorta ascendente tienen una naturaleza elástica que permite que la aorta se expanda ligeramente a medida que se bombea sangre desde el corazón. Un aneurisma aórtico ascendente ocurre comúnmente cuando las fibras pierden su elasticidad o cuando las fibras o la pared aórtica se endurecen. Otra causa de aneurisma aórtico ascendente es la disección aórtica, que es una condición que involucra la separación de las capas interna y media de la pared aórtica. Una variedad de infecciones y trastornos genéticos pueden conducir al desarrollo de aneurismas aórticos ascendentes, al igual que problemas de estilo de vida como fumar, presión arterial alta y colesterol alto.
Un aneurisma aórtico necesita atención médica porque es una afección grave y potencialmente mortal. El principal problema con la detección temprana de la presencia de un aneurisma es que hay muy pocos síntomas. A menos que haya una expansión rápida del aneurisma, comience a gotear o haga que la válvula aórtica gotee, a menudo no hay síntomas. El crecimiento rápido o la fuga pueden hacer que el paciente sufra dolor en la parte superior de la espalda o dolor alrededor del diafragma y dificultad para respirar. Un aneurisma grande puede hacer que el paciente experimente dificultad para tragar y ronquera.
Hasta el 40 por ciento de los aneurismas aórticos se detectan mediante ecocardiogramas, tomografías computarizadas torácicas y radiografías de tórax realizadas por razones no relacionadas. Una vez que se detecta un aneurisma aórtico ascendente, su crecimiento y tamaño se controlan de cerca. Se realizará una cirugía, cuando sea necesario, para extraer el trozo de aorta que contiene el aneurisma y reemplazarlo con material sintético. No existe ningún medicamento, a partir de 2010, para reducir el tamaño de un aneurisma o detener su crecimiento, pero los cambios positivos en el estilo de vida son importantes para controlar y manejar la afección. Dejar de fumar, una dieta saludable y una reducción del colesterol son importantes en el manejo del aneurisma aórtico ascendente.