No se ha demostrado clínicamente que haya una dieta particular para la esclerosis múltiple (EM) que reduzca los síntomas asociados con la enfermedad. La dieta más conocida para la esclerosis múltiple es seguir las mismas pautas para una alimentación saludable recomendadas para la población general. Ha habido varios pacientes que han informado una disminución de los síntomas después de la eliminación de alimentos como el gluten y las legumbres de su dieta.
Las personas con EM pueden experimentar con combinaciones de alimentos para ver si también tienen una sensibilidad que empeora los síntomas de la enfermedad. Otros métodos que han sido reportados, pero no probados, son efectivos, como altas dosis de vitaminas y el programa MS Best Diet, deben abordarse con precaución, y es mejor tomarlos con la guía de un médico.
En general, la mejor dieta para la esclerosis múltiple es la misma que el régimen alto en fibra y bajo en grasa que se recomienda para el público en general. Los pacientes con esclerosis múltiple pueden mejorar su salud y, posteriormente, controlar los síntomas, evitando el alcohol, la cafeína y los alimentos procesados. La mejor manera de manejar la EM es decidir de manera personal qué alimentos proporcionan los mejores resultados y cuáles deben evitarse.
No ha habido evidencia clínica de que haya una dieta especial generalmente efectiva para pacientes con esclerosis múltiple. La evidencia anecdótica ha demostrado que muchos pacientes han notado una mejora en el manejo de los síntomas al eliminar ciertos alimentos. El gluten y las legumbres parecen empeorar los síntomas para varias personas con la enfermedad.
Una de las dietas más conocidas para las dietas de esclerosis múltiple es la «Dieta Best Bet», creada por Ashton Embry, PhD. Aunque no se ha demostrado clínicamente que sea efectivo, hay varios elementos en la dieta que parecen haber ayudado a las personas con EM. La dieta recomienda evitar el azúcar refinada, las legumbres, los lácteos y el gluten, y limitar la ingesta de levadura y huevos. Se aconseja suplementar con vitamina D3, magnesio y calcio. También hay varios otros aceites, vitaminas y minerales sugeridos, incluido el aceite de pescado omega-3 y el extracto de semilla de uva.
Los pacientes que deseen probar la dieta de esclerosis múltiple «Best Bet» deben consultar a un médico. El equilibrio de vitamina D3, magnesio y calcio en particular debe manejarse adecuadamente para evitar efectos secundarios adversos. Muchos médicos también recomiendan que los pacientes con EM tengan precaución al tomar grandes dosis de vitaminas y minerales, ya que no se ha demostrado que sean más efectivos para controlar los síntomas e incluso podrían ser perjudiciales para la salud.