El recubrimiento de polvo de cromo es conocido por ser duradero, atractivo y resistente a la corrosión, pero debe aplicarse correctamente para que funcione bien. Uno de los primeros factores para recordar es asegurarse de que la superficie esté limpia y seca antes de la aplicación del recubrimiento de polvo de cromo. De hecho, a menudo se recomienda el arenado para asegurarse de que el material esté verdaderamente limpio antes de aplicarle productos. Además, usar las herramientas para hacer esto correctamente, como una pistola de recubrimiento en polvo, puede ayudar a lograr un acabado suave y uniforme. En general, prestar mucha atención a la fase de preparación del proceso de recubrimiento de polvo de cromo generalmente puede conducir a los mejores resultados.
La mayoría de las personas se aseguran de que la superficie esté limpia y desnuda antes de pintar una pared, y se debe aplicar el mismo cuidado al proceso de recubrimiento con polvo de cromo. La superficie debe estar limpia de aceite, suciedad, polvo u otro material antes de aplicar cualquier recubrimiento. Esto se puede hacer mediante el uso de lavado de metal, que puede quitarle al metal cualquier contaminante para que el recubrimiento en polvo se aplique suavemente. Por supuesto, el secado adecuado también es importante, y el mejor método suele ser el secado por soplado, ya que no dejará residuos. Finalmente, es mejor usar guantes de vinilo al manipular el metal para que las huellas digitales no se queden atrás durante ninguna parte del proceso de recubrimiento con polvo de cromo.
Si bien la limpieza con lavado de metal a menudo es suficiente para eliminar los contaminantes en la superficie, puede ser necesario hacer grandes esfuerzos para que el metal esté impecable antes del recubrimiento con polvo de cromo. El chorro de arena puede ayudar a garantizar que el metal esté realmente desnudo para que el recubrimiento se pueda aplicar de manera uniforme. De lo contrario, puede extenderse de manera desigual, terminar demasiado espeso en ciertas áreas del metal y extenderse demasiado en otras.
Otra forma de asegurar la uniformidad del recubrimiento es usar las herramientas necesarias de manera adecuada. Por ejemplo, la pistola manual de recubrimiento en polvo debe moverse suavemente sobre la superficie para asegurarse de que la pintura tenga el mismo grosor. Si es obvio que el recubrimiento es demasiado grueso en algunas áreas, se debe reducir el voltaje en la pistola, aunque el tiempo total de pulverización también se puede reducir para asegurarse de que el recubrimiento no sea demasiado grueso. Por supuesto, la calidad de la pistola también puede marcar la diferencia en el resultado final del proceso de recubrimiento con polvo de cromo, que es importante tener en cuenta antes de comprar una.