El entrenamiento isocinético es una rutina de entrenamiento que utiliza equipos para desarrollar y mantener los músculos a través de un cierto proceso conocido como isocinética. El entrenamiento isocinético se centra en trabajar músculos específicos a un ritmo constante; una máquina isocinética variará debido a la velocidad y resistencia para mantener los músculos trabajando a un ritmo constante, mejorando así el rendimiento muscular y construyendo fuerza sin correr el riesgo de lesiones por sobreestimulación. Una rutina de entrenamiento isocinético es particularmente útil para los atletas y otras personas que superan lesiones, ya que a menudo previene la lesión del músculo que se está trabajando. El entrenamiento isocinético también es útil para proporcionar un entrenamiento base que se puede construir con pesas u otros ejercicios más extenuantes.
La gran ventaja del entrenamiento isocinético es la capacidad de la máquina para satisfacer las necesidades del usuario. Los ejercicios isocinéticos a menudo se realizan cuando una persona se está recuperando de una lesión porque el estado del músculo cambiará en el transcurso del período de entrenamiento. Cuando el músculo es débil, no puede producir mucha fuerza contra la máquina. Por lo tanto, la máquina compensará aplicando tanta resistencia como la que proporciona el usuario. A medida que el músculo se vuelve a desarrollar, se vuelve más fuerte y puede proporcionar más resistencia. La máquina también aumentará su resistencia contra el músculo para que coincida. La máquina no superará la cantidad de resistencia que el usuario está produciendo.
El entrenamiento isocinético se usa a menudo en combinación con otros tipos de entrenamiento. A menudo no es un regimiento de entrenamiento independiente porque solo hace mucho para desarrollar músculo o tono. Es un trampolín hacia otros ejercicios y puede preparar los músculos para entrenamientos más extenuantes, como levantar pesas, correr o andar en bicicleta. Algunos de los beneficios del entrenamiento isocinético son el aumento de la movilidad, que puede ser útil en deportes que requieren moverse en muchas direcciones, como el fútbol; musculatura base, que es útil cuando un principiante quiere levantarse de pesas; y recuperación muscular, que es útil para cualquier atleta que se recupere de una lesión o ausencia prolongada del deporte.
Otros aspectos de un entrenamiento isocinético incluyen el uso de una banda de resistencia. Esta banda de goma tiene un asa en el extremo y puede ser atada o asegurada a un objeto fijo como una pared o poste. Cuando el usuario tira de la banda elástica hacia atrás, la banda elástica se resiste. Cuanto más retrocede el usuario, más se resiste la banda. De esta manera, la banda es una herramienta isocinética, aunque es imprecisa: debido a que la fuerza real que se aplica a la banda no se puede medir, es imposible saber si la banda está resistiendo al mismo nivel que el músculo está tirando.