El jarabe de arroz es un edulcorante natural hecho de arroz cocido que se trata con enzimas para convertir los almidones del arroz en azúcares. Junto con otras alternativas al azúcar, este jarabe generalmente se puede encontrar en tiendas de alimentos naturales y en algunos mercados grandes. Se puede usar como miel, melaza y otros edulcorantes líquidos, y con cierta planificación también puede reemplazar el azúcar granulada. Como causa una elevación en el azúcar en la sangre, no es adecuado para los diabéticos.
La base del jarabe de arroz es el arroz cocido. Por lo general, se usa arroz integral, ya que está destinado a ser un alimento saludable. El arroz se inocula con enzimas que convertirán los almidones, y la mezcla se deja reposar. Después de un tiempo establecido, se desnata un líquido desde la parte superior y se reduce a una mezcla densa de color marrón oscuro, que se envasa y se vende.
Las personas con intolerancia al gluten deben leer cuidadosamente las etiquetas de jarabe de arroz. Muchos productores cultivan las enzimas necesarias para hacer jarabe en granos que contienen gluten. A menos que la etiqueta especifique claramente que el producto no contiene gluten, se debe suponer que el alimento contiene gluten. Aunque solo puede estar presente en pequeñas cantidades, puede ser suficiente para alterar un estómago delicado.
Cuando se usa jarabe de arroz para reemplazar otros azúcares líquidos, se puede usar como una taza para reemplazar la taza. El edulcorante tiende a ser menos dulce que muchos otros azúcares, y tiene un ligero sabor a nuez que no siempre es apropiado para todos los alimentos. Los cocineros deben probarlo antes de usarlo ampliamente, y pueden querer experimentar con lotes pequeños antes de comprometerse. Como el jarabe de arroz es menos dulce, el plato final obviamente será menos dulce también.
Cuando se usa jarabe de arroz para reemplazar el azúcar granulada y otros edulcorantes secos, debe hacerse con cuidado. Como es un líquido, puede causar un desequilibrio líquido en la receta, que puede ser desastroso para los productos horneados. En general, se debe usar alrededor de un cuarto de taza de jarabe por cada taza de azúcar, y se debe quitar un cuarto de taza de algún otro líquido en la receta para compensar la humedad adicional en los alimentos. La sustitución del azúcar con jarabe de arroz puede llevar algo de experimentación a la perfección, por lo que pequeños lotes y paciencia son la clave.