La filoquinona es otro nombre para la vitamina K1, una vitamina utilizada principalmente por el cuerpo para la coagulación sanguínea adecuada. La vitamina K1 es una vitamina liposoluble, lo que significa que se almacenan cantidades excesivas en el tejido adiposo del cuerpo en lugar de excretarse como vitaminas solubles en agua. El nombre de vitamina K proviene de la palabra alemana para la coagulación de la sangre o coagulación.
Varios alimentos son naturalmente ricos en filoquinona, incluidas las verduras como las espinacas, las coles de Bruselas y el repollo. La filiquinona también está presente en los aguacates, el café, el té verde y varios tipos de frijoles. Además de las fuentes dietéticas, las especies de bacterias normalmente presentes en el intestino humano producen esta vitamina. Esta producción se puede mejorar consumiendo leche cultivada y productos de yogurt.
La gran variedad de alimentos con altos niveles de filoquinona y el hecho de que esta vitamina se produce en el intestino humano significa que las deficiencias de vitamina K son raras, especialmente en los países occidentales. Sin embargo, algunas personas pueden tener un mayor riesgo de esta deficiencia, incluidas las personas que toman anticoagulantes, problemas hepáticos o dietas muy estrictas. Otras personas con función intestinal anormal, como la enfermedad inflamatoria intestinal o las personas con regímenes altos o prolongados de antibióticos, también pueden estar en riesgo de deficiencia. Los síntomas de deficiencia están relacionados con las funciones de coagulación sanguínea de esta vitamina e incluyen hemorragias nasales frecuentes, sangrado de encías, moretones fáciles o sangrado abundante durante la menstruación.
Una condición peligrosa en los recién nacidos conocida como enfermedad hemorrágica se asoció con la falta de niveles normales de vitamina K1. Esto se explica por el hecho de que los recién nacidos aún no contienen las especies de bacterias productoras de vitamina K1 en sus intestinos. Por esta razón, los bebés nacidos en los EE. UU. Reciben inyecciones de vitamina K. Una pequeña minoría ha declarado que estas inyecciones están asociadas con mayores tasas de leucemia infantil, pero debido a que nunca se ha demostrado una conexión, las inyecciones de vitamina K son una práctica estándar en Estados Unidos y están obligados por ley en algunos estados.
Además de su papel en la coagulación de la sangre, la filoquinona es necesaria para ciertas proteínas importantes en la formación ósea. Debido a la asociación de la vitamina K con la formación de hueso, varios estudios han examinado la posible relación entre los bajos niveles de vitamina K y el desarrollo de osteoporosis. La osteoporosis es una condición relativamente común en mujeres pequeñas de ascendencia europea en la que los huesos se vuelven frágiles y propensos a fracturarse después de la menopausia.
Aunque algunos estudios han sugerido que podría haber un vínculo entre los bajos niveles de vitamina K y un mayor riesgo de fractura de cadera, los resultados no fueron concluyentes y un vínculo real entre la vitamina K y la osteoporosis no está claro. A pesar de esta falta de claridad, muchos tratamientos naturales para la osteoporosis implican una mayor ingesta de vitamina K. Además, varios suplementos de construcción ósea de venta libre contienen esta vitamina además de la vitamina D y el calcio.