Controlar la cantidad de grasa, usar caldo reducido en sodio y agregar muchas verduras, así como algo de pescado o pollo, son consejos útiles para hacer un risotto saludable. Usar vino con el caldo es una forma sabrosa de aumentar el sabor sin agregar grasa. Un risotto preparado adecuadamente no debería requerir que se le agregue mantequilla antes de servir, sino solo una pequeña cantidad de aceite de cocina para saltear las verduras y los granos. Cualquier grano, como el arroz Arborio, la cebada o la quinua, puede usarse para hacer un risotto saludable.
Cebolla, ajo y verduras como puerros, judías verdes, calabacín y brócoli deben saltearse con la menor cantidad de aceite posible. Se podría usar un poco de agua para vaporizar ligeramente las verduras, pero definitivamente no se deben hervir en ellas. También se debe usar una pequeña cantidad de aceite para saltear el grano, ya que esto realmente puede resaltar el sabor de la quinua, la cebada, el arroz u otros granos. Después de saltear las verduras y los granos, el siguiente paso para hacer un risotto saludable es combinar el vino con el caldo en la sartén.
Es importante seguir revolviendo la mezcla de caldo y vino. El vino necesita hervir a fuego lento hasta que el volumen del líquido se reduzca a la mitad. Esto asegurará que el alcohol se queme lo suficiente. De lo contrario, el sabor no será tan rico y puede arruinar el sabor general del risotto saludable. Un vino blanco y caldo de pollo o vegetales con sodio reducido puede funcionar bien para la mayoría de los risottos.
Se pueden mezclar trozos de pescado cocido o pollo magro en el risotto terminado. Otra posibilidad es agregar las hojas de espinaca y el queso parmesano justo antes de servir. Para hacer un risotto saludable, se debe tener cuidado de no usar demasiado queso, ya que esto puede aumentar en gran medida el conteo de grasas y calorías, así como la cantidad de sodio en el plato. Un consejo para hacer que el risotto sea más saludable cuando se usa queso es espolvorearlo encima a la hora de servir en lugar de mezclarlo de antemano.
Un gran consejo para recordar es que cuando se agrega una proteína al risotto, cambia de un plato de acompañamiento a un plato principal. Con la proteína, los granos y los productos en un solo plato, además de una pizca de queso para lácteos, se tienen en cuenta todos los principales grupos de alimentos. Cuando se usa pescado en un risotto saludable, puede ser una gran idea agregar un poco de jugo de limón fresco para darle más sabor. Esto también puede ser una buena idea cuando se usan frijoles en lugar de pescado o pollo.